LAS “ESDRÚJULAS”
El
Club Atlético Águilas Púrpuras de
Villa La Ciénaga gozaba de un óptimo desempeño en el ámbito futbolístico regional. “Los galácticos”, tal su seudónimo, tenían por hábito
la cúspide de la liga que los tenía
como partícipes.
Sus
antípodas eran “las violáceas”, tal como se apodaba al femíneo equipo del club. Su paupérrima campaña las había situado en
el décimo puesto del fútbol antagónico, sobre doce. Por ello, de sarcástica manera, “los galácticos” las llamaban “las esdrújulas” por ser las “penúltimas”, como dichas sílabas con tilde.
Cuando
“las violáceas” se enteraron de la antipática burla, los tildaron de misóginos y quedaron ávidas de una drástica venganza. Ni hablar de la histérica reacción que les causó un artículo en el periódico local
que decía que “los galácticos”
recibirían un premio estímulo por sus
éxitos: una excursión turística por la región patagónica de nuestra república, con pasajes aéreos incluidos.
Coléricas,
pidieron igualdad de género y
derechos análogos a las autoridades
de Águilas Púrpuras. La réplica fue categórica: la estadística
económica del club quedaría en déficit
al solventar otro éxodo turístico similar. Las féminas seguían indóciles y la cúpula
dirigente decidió darle una lúdica
solución al bélico reclamo: una
contienda futbolística entre ambos
equipos. Para quienes lograran el éxito
sería el ya polémico viaje. Sabían,
en íntimo cálculo, que el match sería
un trámite para los varones por la física disparidad.
Las
chicas, escépticas, pensaron en una honorífica renuncia al hipócrita desafío, para no quedar en ridículo ante el eventual público asistente al estadio de La Ciénaga.
Fátima Galápagos,
la directora técnica “violácea”, fue categórica: “¡Sobre nuestros cadáveres deberán pasar!” Sus discípulas quedaron atónitas ante la intrépida
expresión.
Fátima
era una espléndida mujer, tan erótica como simpática, con piel de ébano
y unos glúteos dignos de un paro cardíaco. Era sólida su postura, un estímulo
para el resto, y disipó el pánico de
sus pares. “¡Arriba el ánimo! ¡Con mi
táctica haremos trizas sus ínfulas y todos los pronósticos!”
En
la mañana domínica, previa al
improvisado “clásico” interno en el
Club Atlético Águilas Púrpuras, Fátima se apersonó con su diabólico físico en la concentración de
los “galácticos” para establecer un diálogo con sus pares. Lázaro Sepúlvera, el entrenador, creyó válido su ingreso, al ver, con beneplácito que sus propósitos eran muy útiles:
evitar un caótico fracaso de las féminas del club.
Ya
adentro, Galápagos mantuvo una cálida plática con los hercúleos futbolistas, quienes sin
ningún escrúpulo ojeaban su anatómica silueta. “Mi súplica, ante disímiles géneros, es una benévola
conducta hacia mis jóvenes
jugadoras”, remató la “técnica” en su
retórica.
El
“Dóberman” Córcega, áspero zaguero “galáctico”, le hizo una incómoda
pregunta: ¿Tendrá recíproca el favor?
Fátima ni se inmutó ante tan impúdica propuesta: “¡Estoy a sus órdenes! ¡Enfrento a un ejército por ellas!”
Fue
como arrojar un fósforo a la pólvora. Con una pícara sonrisa en sus carmíneos
labios, Fátima vio entrar en volcánica erupción a ese plácido ámbito deportivo. Se sintió
aquella mediática rubia, antes de su mítica bacanal con los gauchos del gasómetro.
…………................................................................
Por
la tarde, con un árbitro foráneo para
evitar polémicas, las antípodas se enfrentaron en el insólito “clásico”. La incógnita del público era saber si “las violáceas”
podían ser un obstáculo para un nuevo
éxito de “galáctico”, algo utópico
desde lo teórico.
Quien
sí daba crédito a sus dirigidas era Fátima. Famélica, llegó cargando con su físico
hasta el banco de suplentes de las féminas,
previa ingesta de dos mayúsculos
sándwiches de milanesa. Se la veía lánguida
y algo enigmática.
El
réferi pitó y la esférica comenzó a rodar. Desde la génesis del partido, “los galácticos”
impusieron un dominio hegemónico. Al
minuto, Rómulo, su líbero, se impuso en el juego aéreo y metió un frentazo que la
arquera Angélica Digiácomo atajó, revolcándose. Luego, la mediocampista Verónica Leónidas salvó, a centímetros de la línea, otra ocasión.
Pero
tanto fue el cántaro a la fuente que,
en el decimoséptimo minuto, Diógenes “el Mágico” Córdoba clavó el
balón en el ángulo derecho de Angélica con un magnífico zurdazo.
En
el último minuto de la etapa, después
de un sinnúmero de ocasiones, el “Búfalo” Cáceres pisó el área y definió cruzado tras un milimétrico pase del “Mágico”.
Fátima Galápagos
veía cómo su táctica era un estrépito fracaso y el período inicial moría con un 0 - 2 en
contra. Trémula, se puso de pie y les
dio ánimo a sus discípulas: “Tranquilas. Estos energúmenos
sueñan con un cómodo triunfo, que
será efímero. Mi fórmula no fallará.”
En
el segundo período, el trámite sufrió una drástica mutación. “Los galácticos”
pasaron del ímpetu frenético a un juego monótono y abúlico. “Las violáceas”,
dóciles a las órdenes de Fátima y al límite de su entrega física, les dieron un rápido vuelco a los dígitos…
Primero
Bárbara Domínico, la capitana, rompió
todos los cánones con un atómico remate desde el semicírculo del área que dejó estático
(como un espantapájaros) a “Tarántula” Álvarez, portero “galáctico”. El gol envalentonó a las féminas, que adelantaron líneas en pos de una hipotética paridad. Y ésta llegó con un antológico gol olímpico de la volante Mónica
Espíndola, que dejó atónitos a
sus rivales e incrédulo al público
presente.
“Los
galácticos” daban lástima. Era patético verlos débiles, anémicos, sin hacer pesar su género… Y las subestimadas “esdrújulas”, arengadas por Fátima, quien recuperaba su estética figura, siguieron con su vorágine, logrando que los fanáticos de Águilas Púrpuras se tornaran empáticos
hacia ellas.
Y
lo utópico ocurrió… Una magnífica apilada y una lírica definición de Jésica “Libélula” Ávalos desataron el júbilo
en las gradas.
Ni
un célebre futurólogo hubiese dado ese
ilógico pronóstico… La pálida
imagen de “los galácticos”, arrastrándose por la cancha, contrastaba
con la óptima actuación de las féminas, quienes daban cátedra en búsqueda de la definición.
En
la última jugada, Úrsula “la víbora” Ártico partió como un relámpago
en contragolpe, dejó en ridículo a “Tarántula” Álvarez gambeteándolo y, sin obstáculos,
le puso la rúbrica al categórico resultado: un épico 4 a 2, una histórica goleada.
Cuando
el árbitro pitó y señaló el círculo central, marcando el epílogo del cotejo, fue éxtasis total en “las violáceas” y lágrimas de emoción en los ojos de Fátima, su directora técnica.
La turística Patagonia las esperaba
con sus espléndidos paisajes.
Pero
nadie del público entendía la catastrófica debacle física y futbolística de
los varones, que los llevó a la inédita
derrota, como si una maléfica pócima
hubiese causado un tóxico efecto
sobre sus músculos.
Ignoraban
la íntima visita de la Señorita Galápagos a la concentración “galáctica”, escasas horas antes del “clásico”. Fue cuando Fátima emuló a Vávara, la orgiástica y pirómana princesa rusa que hizo de una
taberna un prostíbulo y luego una flamígera trampa…
Aunque,
en esta crónica, la posterior e ígnea tragedia masculina sería sobre los
céspedes de un rectángulo de juego.
Jorge Emilio Bossa
Tercer
Premio Género Cuento
Categoría
Adultos
IX
Certamen Literario Nacional de Cuento y Poesía 2024
9 de Julio (Bs. As.), noviembre de 2024
IX
CERTAMEN LITERARIO NACIONAL DE CUENTO Y POESÍA 2024
PREMIACIÓN
CUENTO ADULTOS
PREMIOS:
1ero
- “Reflejo” - Mónica Fazzini - Ciudad de Buenos Aires
2do
- “Sueño” - Jorge Griffa - Ciudad de Mendoza
3ero
- “Las esdrújulas” - Jorge Bossa - San Francisco (Córdoba)
4to
- “Un tren a las nubes” - Miriam Picciola - La Plata (Buenos Aires)
MENCIONES
NACIONALES:
1era
- “María sin lágrimas” - Alicia Coronel - Junín (Buenos Aires)
2da
- “Involucrado por la experiencia” - Lucía Español - Pehuajó (Buenos Aires)
3era
- “Del dicho al hecho - Juan Carlos Viale - Cañuelas (Buenos Aires)
4ta
- “Historias de fogón - Ana María Flores - Tres Lomas (Buenos Aires)
5ta
- “Piedad” - Stella Maris Jáen - 9 de Julio (Buenos Aires)
MENCIONES
DE HONOR:
1era
- “Evangelina” - Jorge L. Merlo - 9 de Julio (Buenos Aires)
2da
- “Una pelota para Navidad - Sebastián Ocampo - Rosario (Santa Fe)
3era
- “Una foto y su canto” - Gustavo Abraham - 9 de Julio (Buenos Aires)
4ta
- “Interrogante” - Griselda Frachia - Trenque Lauquen (Buenos Aires)
5ta
- “Hallazgos” - Claudio Mamud - Ciudad de Buenos Aires
No hay comentarios:
Publicar un comentario