“No digáis que, agotado su tesoro, de asuntos falta enmudeció la lira.
Podrá no haber poetas, pero siempre habrá poesía”
Gustavo Adolfo Bécquer

jueves, 6 de julio de 2017

A Tulumba


A TULUMBA

Texto: Teresita Fava de Maggi
Fotografías: Jorge Emilio Bossa

Camino por las calles de esta Tulumba querida,
las campanas del templo me dan la bienvenida
y ponen música al atardecer silencioso de la villa…
Los árboles de la plaza con sus ramas retorcidas
son refugio de las aves que me endulzan con sus trinos
y dan sombra a una gran piedra donde sueñan los poetas.
Respiro el aire puro de este valle por un Cristo protegido
que desde lo alto del cerro bendice a los tulumbanos,
pueblo que tiene páginas en la historia de nuestra tierra,
porque por sus calles pasaron hombres que dejaron huellas…
(Si aún parece que el galope rompe el silencio en la noche)
Contemplo las ruinas de la vieja capilla de adobe,
cuántos viajeros, hombres creyentes se habrán arrodillado
y recitaron ante una imagen, sus plegarias llenas de pena.

Calles empedradas…casas sencillas…apenas una brisa…
El tiempo se ha detenido. Sólo el hombre ha cambiado.
Miro el cielo…son los colores de mi Patria.
Otra vez las campanas y los pájaros que vuelan
buscando su nido en este atardecer de primavera…