“No digáis que, agotado su tesoro, de asuntos falta enmudeció la lira.
Podrá no haber poetas, pero siempre habrá poesía”
Gustavo Adolfo Bécquer

sábado, 14 de junio de 2025

Vuelo

 

VUELO

 

Pecho blanco, alas azules,

áureo el corazón…

Vuela alto, vuela lejos…

No tengas temor.

 

Nunca detengas tu viaje…

Confíanos el nido

en el que naciste, hace

ya más de dos siglos.

 

Vuela, águila guerrera,

vuela en son de paz…

Que la sangre tu plumaje

no salpique más.

 

Vuela con las alas límpidas,

inmaculado el pecho…

A ti y a tu creador

siempre honraremos.

 

Jorge Emilio Bossa

 

Primer Premio - Género Poesía - Categoría Adultos

Concurso de Arte y Literatura Puente de palabras XXII

Premio “Bandera de la Paz”

Rosario (Santa Fe), junio de 2025




 








GANADORES EN LA CATEGORÍA ADULTOS

 

CONCURSO POESÍA:

 

1er Premio - VUELO - Jorge Emilio Bossa

2do Premio - CALMA INTERIOR - Marisa Isabel Medrano

3er Premio - HUELLAS - Silvana Repetti

4to Premio - LUNA DE OCTUBRE - Nilda Gedimi

5to Premio - POR UN TIEMPO MEJOR - Liliana Bonato

 

1ra Mención - NIÑA DE LUNA - Maritxé Abadi Bueno

2da Mención - ATAJOS - Liliana Acquaviva

3ra Mención - EN EL SUSURRO DEL VIENTO - María Nidia Decoud

4ta Mención - OCASO ILUMINADO - Marta Toro

5ta Mención - CREACIÓN - Gabriela Alzogaray

 

CONCURSO MICRORRELATO:

 

1er Premio - DESDE LA PIEL - María Rosa Rzepka

2do Premio - GRATITUD - María Posse

3er Premio - EL HADA DE LOS SUEÑOS - Maricel Peralta

4to Premio - DESILUSIÓN - Mirta Frea

5to Premio - ESPÍRITU DEL BOSQUE - Patricia Maldonado

 

1ra Mención - SOY PARTE DE MI TIERRA - Andrés Baodoino

2da Mención - LA LUZ ROTA DE LA CALLE - Betsabé Aquaroli

3ra Mención - AROMA A MATE - Wilfredo Bernaola

 

CONCURSO CUENTO O NARRATIVA:

 

1er Premio - CAMINO MI CIUDAD - Elías Galati

2do Premio - EL AMANECER DEL COLTAN - Francisco Araya Pizarro

3er Premio - DESGRACIA - Diana Blanco

4to Premio - AGUJEROS - Betty Santella

5to Premio - SOLEDADES - Stella Maris Gamba

 

1ra Mención - LA CAUTIVADA CULTIVADORA - Susana Moreno

2da Mención - EL ÚLTIMO VIAJE - Graciela Rossetti

3ra Mención - VALIOSAS AMISTADES - Isabel Galán

4ta Mención - CRÓNICA HÍPICA - Juan Carlos Chaparro

5ta Mención - CACHILO - Delia Díaz

 

Los trabajos seleccionados integran el libro “PUENTE DE PALABRAS XXII”



miércoles, 30 de abril de 2025

Apariencias

 

APARIENCIAS

 

Engañosa imagen…

 

Ella allí se muestra

candorosa y bella,

con su cuerpo enhiesto

y su dermis suave

y a la vez fragante…

Tan plena de vida

en las apariencias.

 

Mas todo es mentira…

 

Pues de un modo absurdo,

al verla tan pura,

al verla indefensa,

cortaron sus venas

y la condenaron

a una muerte abrupta

y a la vez tan lenta.

 

Quizás no exista

cadáver más bello

que el que ahora luce

bajo una mortaja

hecha en celofán,

en un ataúd

de fino cristal,

mientras se desangra

de parsimoniosa

y burda manera.

 

Por eso les ruego

que ofrendas no envíen

para sus exequias.

 

Para flores muertas…

¡Basta con ella!

 

Jorge Emilio Bossa

 

Mención Nacional Género Poesía

22º Certamen Literario Nacional y Países de América del Sur 2024

Premio: “Sra. Nilda Aurelia Hernández”

Los Toldos (Bs. As.), abril de 2025




La revancha

 

LA REVANCHA

 

La cancha del Crespín Futbol Club, ubicada en las afueras de Colonia El Crespín, tenía una particularidad: solo una calle la separaba del Cementerio Comunal. El motivo era que Don Onofrio Sojola, un productor local y socio fundador del club, había donado un par de hectáreas de sus campos para la construcción de dicho estadio. Eligió para ello las más próximas a la zona urbana, razón por la cual se dio esa curiosa vecindad.

 

Los domingos por la tarde, el "centro" del pueblo se mudaba al sector sur del mismo. Los futbolistas, de un lado de la calle, y los santos difuntos del otro, convocaban a casi toda la población.

 

Don Onofrio fue el primer presidente del Crespín Futbol Club, como reconocimiento a su valiosa donación. Cuando falleció, a edad muy avanzada en una mañana estival, la institución decidió realizar un cuadrangular amistoso en su honor, con una copa en juego que llevaría su nombre.

Invitaron a tres clubes de la zona y programaron dicho torneo para febrero, antes del inicio de la actividad oficial. Debido a las altas temperaturas, los dirigentes optaron porque el torneo se dispute en horario nocturno, algo totalmente inusual aun disponiendo de iluminación artificial.

 

El equipo local abrió el torneo, homenajes de por medio, frente al Deportivo La Taba de Villa Verde. Lo que los organizadores no tuvieron en cuenta fue que en el electo visitante jugaba el "Patón" Carbonetti, un líbero de torpes movimientos y con una "patada de mula", según decían los aficionados.

 

A los quince minutos de iniciado el cotejo, el recio defensor, quien no dudaba en "reventarla" para evitar complicaciones, ya había mandado al camposanto a dos de los tres balones que el club organizador había dispuesto para el evento deportivo.

 

El nuevo presidente del Crespín Futbol Club envió al utilero a cruzar la calle y solicitarle al guardia del cementerio permiso para buscarlos. El asistente empalideció y se negó, no solo a ingresar a ese lugar de noche, sino a arrimarse siquiera a la tétrica imagen del sereno del lugar. El mandamás les solicitó a algunos integrantes de la Comisión Directiva con idéntica respuesta, mientras él mismo no se ofrecía para tal misión.

 

Cuando promediaba el primer tiempo, La Taba dispuso de un tiro libre a treinta metros del arco local, que daba espaldas al cementerio. Cuando el presidente vio al "Patón" acomodar el balón, se agarró la cabeza. En ese momento prefirió que la clavara en un ángulo antes de meterla dentro de un panteón...

 

Sucedió algo parecido a lo segundo: la pelota pasó por encima del travesaño, la tribuna, la calle y el muro del cementerio.

Final del partido y de las actividades nocturnas en el club. El torneo fue reprogramado en horario vespertino.

 

Al día siguiente, con las primeras luces del alba y antes de ir a su trabajo, el presidente del Crespín F. C. en persona fue al camposanto con la intención de recuperar los balones perdidos. Se sorprendió al hallar el portal cerrado, sin la presencia del sereno. Justo en ese momento se apersonó el guardia matutino. Pidió disculpas por el retraso y le explicó que debió dirigirse a la casa de su antecesor a buscar las llaves, ya que aquel había huido despavorido por lo sucedido unas horas antes.

Sorprendido, el dirigente escuchó el relato que le contaba que Omar, el vigilador nocturno, oyó ruidos y gritos provenientes del interior del cementerio. Cuando se asomó a ver lo que ocurría, un pelotazo se estrelló en la pared, a escasos centímetros de su cabeza. Allí no dudó. Cerró con llave y escapó del lugar para no volver por el resto de la noche.

 

El presidente pidió permiso y, acompañado del guardia, ingresó a buscar los balones. Asombrados, vieron varios destrozos en el lugar, desde flores y floreros en el suelo hasta el vitral roto en un panteón. La primera pelota que hallaron estaba pinchada, cerca de los vidrios que la habían dañado. La segunda lucía ilesa. Pero la sorpresa mayor fue al ver, cerca de la tercera y en los fondos del predio, dos pares de mortajas dobladas ante sendos tapiales opuestos, emulando a "los arcos del campito".

 

El directivo dejó la esférica donde estaba y le pidió al cuidador que haga lo mismo con la deportiva escena. "Compraré otras pelotas para el club. Seguramente, esta noche la revancha será apasionante" comentó.

 

"Le pediré a mi colega que no se asuste, que es solo un juego", respondió el guardia…

 

Luego aprovechó la ocasión para hacerle, indirectamente, un reproche al presidente del Crespín por la falta de refuerzos para la institución: "Mejor no los enfrentemos nunca. Es muy probable que estos muertos nos ganen".

 

Jorge Emilio Bossa

 

Mención Nacional en Cuento

22º Certamen Literario Nacional y Países de América del Sur 2024

Premio: “Sra. Nilda Aurelia Hernández”

Los Toldos (Bs. As.), abril de 2025




lunes, 3 de marzo de 2025

Nocaut

 

NOCAUT

 

Besó el amor la lona, esta vez,

y el árbitro llevó su cuenta a diez.

 

Quedó semi inconsciente la pasión

y la ternura herida en un rincón.

 

No pudo la cordura ante el dislate

y sucumbió frente al brutal embate.

 

Besó el amor la lona. Luego, el juez,

alzó la mano del falaz campeón

que lo dejara fuera de combate.

 

Jorge Emilio Bossa

 

Mención Especial Categoría Poesía

2º Concurso Literario Internacional

Sociedad Argentina de Escritores Filial San Rafael

San Rafael (Mza.), noviembre de 2024

 


 










GANADORES EN CATEGORÍA POESÍA

 

Primer premio (compartido):

"Luz en la Oscuridad" - Laura Domínguez, San Rafael, Mendoza

"Niños otra Vez" - Leila Sur, Buenos Aires

Segundo premio:

"Es el Amor" - Palacio María Molina, San Miguel de Tucumán

Tercer Premio (compartido):

"La Pluma" - Mirta del Valle Frea, El Arañado, Córdoba

"Zumo de Viñas" - Juan Carlos Pirali, Dolores, Buenos Aires

Menciones especiales:

"Desde el Cielo" - Leticia Decarre, Ciudad de Mendoza

"Nocaut" - Jorge Emilio Bossa, San Francisco, Córdoba

"Anatomía Literaria" - Ana María Figueira, Banfield, Buenos Aires

 

GANADORES EN CATEGORÍA PROSA

 

Primer premio:

"Tormenta sobre Nazareno Arrieta" - Marcelo Passano, Rafael, Mendoza

Segundo premio:

"La Idea" - Ana María Figueira, Banfield, Buenos Aires

Tercer premio:

"El Chasqui" - Augusto Villán, Chacabuco, Buenos Aires

Menciones especiales:

"Más que el Plomo" - Cecilia Beatriz Noce, Ciudad de Buenos Aires

"Quilmes no es una Cerveza" - María Molina Palazzo, San Miguel de Tucumán

"Carta de un Soldado Herido" - Juan Carlos Viale, Cañuelas, Buenos Aires

 

JURADOS: Prof.  Dina Chilczuk, Prof. Marisa Rodríguez y escritor Job Sombra.

jueves, 2 de enero de 2025

Medio gol


 MEDIO GOL

 

La siguiente historia ocurrió en la definición de la última Copa de la F.I.F.A.

No. No les hablo de la Copa del Mundo, ni del Mundial de Clubes. Tampoco de la “FIFA” internacional. Me refiero a la copa organizada por la Federación Interdepartamental de Fútbol Amateur (FIFA al fin).

 

Esta entidad abarca a un puñado de clubes de pequeños pueblos, ubicados en una franja del este cordobés y el oeste santafesino.

Entre estas instituciones, que no tienen presupuesto ni planteles suficientes para jugar en ligas más importantes, se destacan dos. Ellos son, a la vez, los animadores del Superclásico de esta FIFA regional. Uno es, por el lado de Santa Fe, el Deportivo Oro Blanco de Colonia Aurora, que alude a la actividad mayoritariamente lechera de la población. El otro, de Córdoba, es el Green Gold Atletic Club de Plaza Esperanza que alude (aunque en inglés) al oro verde de la soja, que es su principal sustento. No es necesario especificar los colores de las camisetas, sí de sus apelativos: “lecheros” o “tamberos” por un lado y por el otro “sojeros” o “gringos”, este último por la cacofonía en el nombre del club.

 

Estas localidades están muy próximas al límite interprovincial que las separa. A su vez, sus equipos son dueños de una antinomia muy violenta, que derivó en más de una gresca, no solo por cuestiones futboleras en la cancha, sino también en algunas fiestas patronales de la zona, por asuntos de polleras o algún parroquiano con unas copas de más.

 

Había solo dos jugadores (uno por equipo) que tenían una muy buena relación, por haber estudiado juntos en la universidad de la ciudad más cercana. Uno era el Petaco Cornaglia, capitán de Green Gold, un gringo campechano y bonachón. El otro, el Chacho Herrera, líder de Oro Blanco, quien se había “avivado” bastante en la ciudad y sabía cómo sacar ventajas siempre a su favor. Cornaglia era el arquero “verde”. Herrera, el “diez” de los albos. Ellos hacían “buenas migas”, a pesar de sus diferencias de personalidad y de haber sido pretendientes de la misma chica.

Rosalía, la joven en cuestión, se casó con el Petaco por ser de su pueblo y por tener una mejor posición económica que el “lechero”. No obstante, para la madre de Rosalía, Cornaglia era demasiado inocente. Ella siempre le decía a la hija: “te casaste con un salame, tendrías que haber elegido al Chacho”.

 

En la última fecha de la Copa FIFA, que se jugaba todos contra todos en dos rondas, el Green Gold llegaba con un punto de ventaja a la cancha de Oro Blanco. Un empate le bastaba para llevarse el título a Plaza Esperanza.

El partido fue cerrado y violento, como era previsible, y tuvo tres expulsiones en el tiempo reglamentario: una en el equipo local y dos en el visitante. Cuando se disputaba el último minuto del plazo adicionado por el árbitro, y el resultado de cero a cero coronaba campeón a Green Gold, llegó la jugada que terminó de desatar (por si no bastara una) las últimas dos polémicas del partido...

 

Primero, un defensor visitante cruzó en el área a un delantero local, y éste cayó aparatosamente. El referí, que no veía la hora que ese calvario terminara, no podía creer que a diez segundos del pitazo final le cayera ese “regalo del cielo”. Aunque la jugada no fue del todo clara, decidió cobrar la pena máxima. No vaya a ser cosa que la hinchada local lo linchara. Además, el tejido olímpico era bastante improvisado en esa liga para nada profesional.

Allí comenzaron otra vez los tumultos y las discusiones. Mientras tanto, el Chacho Herrera, se quedó parado junto al punto penal con la pelota bajo un brazo. Avispado como era, no quiso que las escaramuzas lo desconcentraran. Además, preparado para ejecutar la pena máxima, intimidaba al árbitro a no echarse atrás con su fallo.

 

Cuando pasó la tormenta, con una expulsión más por bando, el juez ordenó la ejecución del penal. Pensó que en unos segundos se definía todo y volvería tranquilo a su ciudad, peeero…

A pesar de su sagacidad, Herrera un poco nervioso estaba. Por ello, el remate, bajo y fuerte, no le salió tan esquinado como pretendía. Entre el brazo izquierdo y el cuerpo del Petaco amortiguaron el disparo. No obstante, la pelota siguió su recorrido. Cuando ya ingresaba al arco, el guardavalla de Green Gold se repuso, se abalanzó sobre ella y la retuvo. Pero… ¿Cuánto había traspasado el balón la línea?

 

Cornaglia se levantó de inmediato con los brazos arriba y la pelota entre sus manos, al tiempo que el Herrera reclamaba que había sido gol. Los sojeros festejaban ser los campeones y abrazaban al Petaco, quien no se desprendía del balón. Los lecheros, lo mismo hacían con el Chacho. El árbitro y el asistente se miraban atónitos. Por lo engorrosa que fue la jugada y la rapidez del arquero al levantarse, ninguno de los dos tenía certeza alguna para decidir.

 

Obviamente, en esa FIFA no había VAR. Herrera se acercó a Cornaglia pidiéndole que confesara que la pelota había entrado entera, mientras el arquero juraba que solo la mitad y que, para convalidar algo, el árbitro tenía que estar seguro y no lo estaba.

 

Cuando todo se encaminaba hacia una batalla campal, el enganche local abrazó al portero visitante. Le recordó que ellos eran amigos desde hacía mucho tiempo y que esa polémica jugada no podía mancillar esa relación. Además, le dijo que quería evitar que los incidentes pasaran a mayores, al estar los ánimos tan caldeados. Por eso, le propuso aplicar una ley salomónica para la ocasión: “¿Te acordás, cuando estudiábamos, cuántas veces debimos compartir un bizcocho o un paquete de galletitas que uno poseía, mientras el otro solo tenía hambre?”

 

El Petaco no entendía nada. Allí el Chacho le propuso pedirle al árbitro que cobrara “medio gol” y listo...

- Para mi equipo, la mitad que fue, para el tuyo la mitad que no fue, y todos contentos.

- Pero, Chacho… ¡Eso es antirreglamentario!

- En esta Liga nada es reglamentario. No hay túnel, no hay manga, no hay alambrado olímpico. Por eso, para evitar una tragedia, firmamos un “miti y miti”, el partido termina en paz y ustedes se vuelven tranquilos a su pueblo.

 

Cornaglia, atemorizado por los cánticos hostiles de la parcialidad local, pensó que era lo más justo y una salida pacífica y equitativa al embrollo. El árbitro y sus asistentes no dudaron en aceptar la propuesta para huir lo más pronto posible de esa cancha. Así, jueces y capitanes firmaron la planilla convalidando el extravagante “medio gol”. Luego, todo el mundo abandonó el estadio armoniosamente.

 

El equipo visitante regresó en una caravana a bura bocina a Plaza Esperanza, festejando el título luego en la sede del club. Cuando el Petaco llegó a su casa, la mujer le preguntó:

- ¿Estás bien, Gringo? Escuché que el partido fue muy caliente.

- Por suerte estamos bien. El Chacho resolvió una polémica al final y todo terminó en santa paz.

- ¿Y quién ganó?

- N… Nadie… (vaciló el Petaco).

- ¿Entonces, si empataron, salieron campeones ustedes?

- C… creo que sí… (Cornaglia ya tartamudeaba y dudaba).

 

De pronto, la madre de Rosalía, que no dejaba pasar ocasión para clavar su aguijón, irrumpió en el recinto con su celular en mano…

“¿Querés saber quién salió Campeón, hija? Mirá el Facebook de la Comuna de Colonia Aurora -dijo la suegra del Petaco- Está todo el pueblo festejando en la plaza”.

 

El video mostraba a Herrera en andas de la gente, con el siguiente título: “Oro Blanco venció por medio gol a cero a Green Gold y se consagró Campeón de la Copa FIFA”

El arquero “sojero” no podía creer que él mismo había firmado planilla, aprobando el exótico resultado.

 

Su suegra aprovechó la ocasión para clavar otro puñal: “Te dije, Rosalía, que tendrías que haberte casado con el Chacho. Este gringo es un salame…”

 

Jorge Emilio Bossa

 

Segundo Premio Género Cuento

1er Concurso Literario “Profesor Jorge Daniel Testori”

SADE Filial Ensenada

Ensenada (Bs. As.), noviembre 

 


LOS PREMIADOS

 

Los ganadores en la categoría Narrativa fueron: 

 

Primer Premio: Facundo Iván Sánchez (Henderson - Bs. As.) por “Visitantes”

Segundo Premio: Jorge Emilio Bossa (San Francisco - Córdoba) por "Medio gol"

Tercer Premio: Gabriela Alzogaray (San Pedro - Bs. As) por "El funámbulo"

 

Las menciones en esta categoría correspondieron a:

 

"Solo una cena" de Adriana Beatríz García (Lanús Este)

"La vieja ch@ta de al lado" de Melany Denisse Bobbio (Ensenada)

"Hecho en el infierno" de Alicia Edith Pereyra (Berisso)