“No digáis que, agotado su tesoro, de asuntos falta enmudeció la lira.
Podrá no haber poetas, pero siempre habrá poesía”
Gustavo Adolfo Bécquer

viernes, 15 de enero de 2021

Una botella en el río (Segunda publicación)

 

UNA BOTELLA EN EL RÍO


El sol matizaba la villa serrana, aquella tarde de marzo. Pero no podía darle brillo. La costanera y su barrio más próximo mostraban un paisaje desolador. Pía, una lugareña de solo diez años de edad, cruzó escombros y fango y se acercó al río. En sus pardos ojos se notaba la tristeza. En sus morenas manos llevaba una botella de vidrio, tapada con un corcho, y un papel enrollado en su interior. El mensaje estaba dedicado a ese pequeño curso de agua que la vio crecer. En él le recriminaba la mala actitud que había tenido un par de días antes. Aquella aciaga mañana la correntada arrasó con los juegos infantiles que había en la ribera. No conforme con ello, ingresó al pueblo y destruyó, entre otras, su casa. A causa de ello, Pía vivía en el polideportivo del club, evacuada junto a su familia. La esquela comenzaba diciendo “Creí que eras mi amigo”. Luego de una lista de reproches, culminaba con un duro “¡No quiero volver a verte! ¡Adiós!”

La niña arrojó con rabia la botella al agua. Después vio como la corriente la arrastraba como un bote a la deriva. Una década de amistad se iba con ella. Cuando la perdió de vista, se marchó llorando del lugar.

 

Al día siguiente, Pía regresó arrepentida a la costanera. Se sentó a orillas del río y comenzó a acariciar el agua que corría serena por el lugar. Luego le dijo: “¿Sabes una cosa? Le conté a mi papá lo que hice y él me respondió que no debía enojarme contigo. Me dijo que si tu dulce canto un día se transformó en un furioso rugido, no fue por tu culpa. Somos los humanos los que te maltratamos y te hacemos enojar. ¿Me perdonas?”

La pequeña se quedó en silencio un largo rato, mientras seguía acariciando el transparente lomo del río. Solo podía oír su murmullo, ese suave murmullo que parecía decirle: “No te preocupes, Pía. Si entendiste el mensaje de tu padre… ¡Siempre seremos amigos!”

 

Autor: JORGE EMILIO BOSSA

 

Distinguido con Mención de Honor Género Cuento en el “Cuarto Certamen Internacional de Literatura Infantil escrita por Adultos” de Ediciones Mis Escritos de Buenos Aires en 2017.

 


Publicado en el libro de cuentos y relatos “Trampa”, de Jorge Emilio Bossa, impreso en La Imprenta Digital de Florida (Buenos Aires) y presentado en 2018 en el Museo de la Ciudad de San Francisco (Córdoba).

 


Adaptado y publicado en el Cuaderno de Ejercicios "Cambridge IGCSE - Español como Primera Lengua" por la Editorial HODDER EDUCATION (Londres- Inglaterra), compilado por Carina Balbo, Simon Barefoot y Mónica Morcillo Laiz en 2020.




No hay comentarios:

Publicar un comentario